Como se preveía fue un partido emocionante en el Stadio Giuseppe Meazza, con los dos equipos jugando con mucha intensidad desde el comienzo. Y precísamente a tres minutos del inicio, Diego Milito aprovechó un balón en el vértice izquierdo dentro del área, rompiendo la cintura de Terry y conectando un derechazo que se coló por la cepa del palo derecho y ante el que Cech no pudo hacer nada. Golazo y subidón de adrenalina tanto en el equipo como en los tifossi neroazzurri. Tras el varapalo inicial, el Chelsea se fue adueñando del balón con el paso de los minutos, y comenzó a llegar a la portería de Julio César con un remate de Kalou, y sendas faltas lejanas ejecutadas por Ballack y por Drogba, que estrelló el balón en el larguero haciendo que la portería se tambalease, un golazo si hubiera entrado. Tambien Drogba intentó marcar con un remate a media vuelta dentro del área pero se marchó desviado del palo izquierdo de Júlio César. Así terminó el primer tiempo.
Nada más comenzar la segunda parte, una internada de Ivanovic (perfecto anoche) poniendo un centro a la frontal, encontró rematador en Kalou, que se sacó un magnífico disparo colocado con rosca al palo izquierdo del portero del Inter estableciendo el empate en el marcador. Poco tiempo tuvieron los blues para la alegría ya que a los tres minutos Cambiasso, tras dos disparos consecutivos al borde del área, conectó un segundo zurdazo cruzado ante el que nada pudo hacer el guardameta checo del Chelsea.
El Chlesea siguió dominando el encuentro y en un lance, Cech se autolesionó y tuvo que ser sustituído por el veterano portugués Hilário. El Inter no puso a prueba al portero en lo que restaba de encuentro, y quizás si lo hubiera probado podría haber obtenido recompensa, dado que el portugués (sin desmerecer) no está ni mucho menos cerca de la calidad de Cech. Al borde del final, tras una gran jugada Lampard no acertó con la portería y el portero brasileño del Inter rechazó su remate. Los blues no merecieron la derrota por fútbol y por ocasiones, pero se vuelven a Londres con desventaja en el marcador y obligados a marcar en un partido de vuelta que promete ser apasionante en Stamford Bridge. 50% vs. 50% en la eliminatoria.
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