Finalmente, y tras el cuarto partido entre los dos conjuntos, pudimos ver algo de fútbol por parte de ambos, y es que esta vez el sabor que nos deja el encuentro es sólo de fútbol, sin violencia ni malas artes, aunque algunas acciones si estuvieron fuera de lugar, como el exceso de «teatro» de los azulgranas exagerando algunas faltas y la excesiva dureza de algunas acciones por parte de los madridistas.
No podemos decir lo mismo del colegiado Frank De Bleeckere, que anuló un gol legal al Real Madrid cuando el partido aún se encontraba 0-0, tras interpretar que hubo falta tras un caída involuntaria de Cristiano Ronaldo que derribó sin querer a Mascherano. Un gol legal, que de haber subido al marcador podría haber cambiado mucho el encuentro y quien sabe si la eliminatoria.
En cualquier caso, y sin tener en cuenta los condicionantes, el Barça fue superior en el global de la eliminatoria y es justo merecedor para disputar el título en la final de Wembley el próximo 28 de Mayo, casi con toda seguridad ante el Manchester United.
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